Los empresarios piden agilidad en los nuevos controles físicos dado que se trata de productos perecederos
Con la materialización del Brexit, tras un acuerdo entre Reino Unido y la UE en el tiempo de descuento, las relaciones comerciales ya nunca serán las mismas. Este nuevo escenario en el que Reino Unido es un país tercero se traduce principalmente en la vuelta a los controles fronterizos físicos, un aumento de la burocracia y nuevos requisitos fitosanitarios. Cabe recordar que Irlanda del Norte, queda al margen de esta nueva relación y no realizará controles de estos productos.
Desde el 1 de enero los nuevos requisitos para exportar a Reino Unido se aplican a los vegetales y productos vegetales considerados de “alta prioridad”, como patata de siembra y para consumo, semillas de varias especies, madera o algunos vegetales para plantación. (Consultar listado aquí). A partir de abril el resto de productos, entre los que está la flor cortada y el resto de plantas, serán sometidos a controles y la obligatoriedad de portar pasaporte fitosanitario. En este segundo grupo también se incluyen excepciones.
Desde la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores (FEPEX), su secretario general, José María Zalbidea, explica a GuíaVerde que “lo que nos preocupa es cómo se van a materializar estos meses las exportaciones en asuntos como la logística y los controles aduaneros, sobre todo con la incorporación de controles físicos en mercancías que son perecederas”. “También preocupa, por una cuestión de competencia, que no se mantengan o haya diferencia de criterios respecto a legislación, sanidad y logística”, señala respecto a la relación comercial entre terceros países.
“Lo que hemos planteado a la administración española desde que se celebró el referéndum del Brexit es que se pongan las menores trabas administrativas, que sea lo más ágil posible, que esta situación no se convierta en un obstáculo para comerciar”, apunta Zalbidea, quien reconoce que “desgraciadamente no hay una dependencia, del Reino Unido, siendo un mercado importantísimo en Europa en el consumo de flores y plantas. El país importa más de 1.500 millones de euros en plantas y flores”.
“El peso de la exportación de flor y planta a Reino Unido es muy pequeña, pues representa un 3% del total, si bien algunos productos tienen un peso destacado como es el caso del clavel”, añade el secretario de FEPEX al tiempo que se muestra optimista debido a que el sector español ya cuenta con amplia experiencia en la exportación a países no comunitarios y en la gestión de inspecciones en origen. Además, apunta a que “Reino Unido siempre ha sido una asignatura pendiente y aunque las obligaciones sean superiores, considero que debería ser un objetivo estratégico para el mercado español”.
FUENTE: GUÍA VERDE